Se escribe Sewell, pero se pronuncia "Subel", el asunto es que este lugar fué declarado Patrimonio de la humanidad por la UNESCO, al igual que los Moais de Rapa Nui y las Iglesias de Chiloé, entre otros lugares. Esto significa que se aportarán lucas para que este lugar sea conservado, como ejemplo del ingenio del hombre y su capacidad de adaptarse a cualquier medio.
Hace un par de años tuve la suerte de visitar el campamento minero Sewell, y pese a no haber estado nunca antes ahí, fué como si hubiese vivido siempre en aquel lugar, ya que mi madre vivió gran parte se su infancia y juventud en esas escaleras, y desde niño oí las historias que contaba acerca de aquel lugar, al principio no tenía idea de que era que me hablaba, no sabía que es lo que era "Subel", al tiempo ya fuí sabiendo lo que era y se me hacía mas facil entender de que hablaba e incluso intentaba hacer mapas mentales para tratar de ubicarme, pero ese laberinto de escalas y pasadisos era absolutamente indescifrable para quien nunca los vió.
Pero una vez estando ahí, todo cuadró perfectamente, teniendo como referncia la antigua estación de tren (bajo la Escuela Industrial), habría llegado perféctamente al edificio (camarote) en el cual vivió mi madre en aquel lugar, salvo por el pequeño detalle de que el edificio ya no existe (desmantelado como el 70% de Sewell, aproximadamente), y por tanto, al ser solo cimientos, no formaba parte del "tour".
...pero ese laberinto de escalas y pasadisos era absolutamente indescifrable para quien nunca los vió.
El ver la ciudad, a uno lo fascina por lo que significa ver un poblado en medio de la nada, y no es para nada un pueblucho feo que uno casi por obligación diga "uuy que bonitas las casitas" (como un antiguo comercial), Sewell es una ciudad maravillosa, con una linea arquitectónica definida, uniforme, armónica. A mi por lo menos me hubiese encantado vivir ahi, pese a todas las diferencias sociales que había allí, pese a la ley seca, pese al aislamiento del resto del país ... no sé de un Sewellino que no añore aquella época.
Sin embargo el ver la ciudad también me dió una pena enorme, el saber que lo que queda en pié es solo un porcentaje menor de lo que alguna vez fué Sewell a uno lo sobrecoge, lo entristece, pero el saber que lo están restaurando es bueno, quizá no lo recosntruyan completo, pero lo que hay no se va a perder, se está cuidando, al menos mientras hayan Sewellinos que sigan velando por su querida ciudad.
Si tienen la oportunidad, visitenla, no se defraudaran.
Hace un par de años tuve la suerte de visitar el campamento minero Sewell, y pese a no haber estado nunca antes ahí, fué como si hubiese vivido siempre en aquel lugar, ya que mi madre vivió gran parte se su infancia y juventud en esas escaleras, y desde niño oí las historias que contaba acerca de aquel lugar, al principio no tenía idea de que era que me hablaba, no sabía que es lo que era "Subel", al tiempo ya fuí sabiendo lo que era y se me hacía mas facil entender de que hablaba e incluso intentaba hacer mapas mentales para tratar de ubicarme, pero ese laberinto de escalas y pasadisos era absolutamente indescifrable para quien nunca los vió.
Pero una vez estando ahí, todo cuadró perfectamente, teniendo como referncia la antigua estación de tren (bajo la Escuela Industrial), habría llegado perféctamente al edificio (camarote) en el cual vivió mi madre en aquel lugar, salvo por el pequeño detalle de que el edificio ya no existe (desmantelado como el 70% de Sewell, aproximadamente), y por tanto, al ser solo cimientos, no formaba parte del "tour".

El ver la ciudad, a uno lo fascina por lo que significa ver un poblado en medio de la nada, y no es para nada un pueblucho feo que uno casi por obligación diga "uuy que bonitas las casitas" (como un antiguo comercial), Sewell es una ciudad maravillosa, con una linea arquitectónica definida, uniforme, armónica. A mi por lo menos me hubiese encantado vivir ahi, pese a todas las diferencias sociales que había allí, pese a la ley seca, pese al aislamiento del resto del país ... no sé de un Sewellino que no añore aquella época.
Sin embargo el ver la ciudad también me dió una pena enorme, el saber que lo que queda en pié es solo un porcentaje menor de lo que alguna vez fué Sewell a uno lo sobrecoge, lo entristece, pero el saber que lo están restaurando es bueno, quizá no lo recosntruyan completo, pero lo que hay no se va a perder, se está cuidando, al menos mientras hayan Sewellinos que sigan velando por su querida ciudad.
Si tienen la oportunidad, visitenla, no se defraudaran.